viernes, 21 de febrero de 2014

Como no te iba a escribir nada

Cuando se suma, se espera, se desespera y te vuelves a ilusionar, no hay marcha atrás...algo ha cambiado para siempre, nada vuelve a su estado inicial.
Es hasta didáctico. Aprendes y desaprendes, que al fin y al cabo, es lo nos hace crecer.
Mejoras, sonríes y el bello se pone en pie. Junto a él, las supuestas mariposas, forman filas dejando paso a la ceguera y al tacto.
Pasa uno, pasan dos y  hasta pueden pasar 7 y la cosa va en "crescendo"...y parecía que no...Aguanta tempestades, morros sin razón y tortillas quemadas...Lo que te digo de la ceguera...
Y si ves apartas la mirada porque todo el mundo se tropieza, pero se uno se levanta mejor si tienes una mano en la que sujetarte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario