martes, 20 de diciembre de 2016

lo que da miedo

Lo que da miedo.
No es ni la oscuridad, ni el monstruo del armario, ni las pelis de terror. Lo que da miedo es tener que aplicar tus pensamientos, llevarlos a término y ver, si como sospechas, duele. Da miedo cambiar, o que cambie, tener que elegir el vestido verde o el negro y darte cuenta que el otro era mejor, pero no te atreviste. Da miedo esforzarse sin  conseguir ese resultado, da miedo rendirse...
Da miedo estar en caída libre continua, sin ver una rama donde sujetarse o llegar al suelo. Da miedo el proceso. Da miedo conseguir la luna y ver que solo está llena de cráteres.
Igual si da miedo la oscuridad, pero esa interna que tenemos todos, de esa que aunque es cómoda, te atrapa y hace que te duela el pecho...Da miedo que pase el tiempo, y que también se pare. No tener una solución para todo, ni la palabra correcta, haberse guardado un lo siento o haberlo dicho antes de tiempo. No tener la certeza ni un "agujerito tranquiliador" por el que mirar y respirar tranquilos.
Así que, no nos queda otra. Si  hay que elegir entre la quietud y el movímiento, movámonos. Total igual ese miedo se pierda por el camino...

martes, 25 de octubre de 2016

Es suficiente.

Y reivindicó lo que ella sabía, lo que creía con firmeza, sin miedo y con una sonrisa en los labios: el amor si es suficiente. Si es amor de verdad, si se apuesta por él, si se lucha...lo que no es suficiente es querer en las tinieblas, esperar que te rescaten y lamentarse porque, quizá, no fue amor de verdad; ¿acaso le diste una oportunidad de crecer, de hacerse fuerte? ¿O le dejaste morir? Así q no vengas con milongas de que querer no es suficiente. Lo es, pero te necesita. Se tiene que alimentar, mimar, tiene que sentir que hay un hueco para quedarse...ojalá un día, sentados en una mecedora, miremos hacia nuestro lado y veamos lo suficiente que ha sido y no un vacío, o un "mecachis". Porque señores, hay que hacer porque sea suficiente, si no no seremos nadie...

martes, 18 de octubre de 2016

A mirar escaparates....(microreflexión)

Se preguntó qué hubiera pasado si nunca hubiera abierto esa puerta, sí hubiera abierto una ventana o un cajón ¿Qué hubiera pasado? Qué pasaría si se quedara quieta, en una esquina o en medio de la calle...¿Sería todo igual? Siempre las mismas preguntas. Cuando pasaba por la parte oscura siempre las dudas le tiraban de la camiseta. Pero esta vez, las ganas habían ido al gimnasio y la llevaron casi en volandas. El pasillo era largo y vio de reojo como la puerta que había cruzado se cerraba de golpe. Solo había un camino, solo una dirección. Tal vez al otro lado podría preguntarse lo mismo o tal vez podría pararse en mitad de la calle a mirar escaparates.

miércoles, 28 de septiembre de 2016

Cuerda

Una cuerda y dos extremos. No se tiene que romper. Ella no descansa, siempre tirante, no sabe donde ir. Qué lado es mejor...qué es lo correcto...si lo hubiera sabido no habría elegido la profesión de cuerda de juego. Ella que pensaba que iba a ser todo más fácil...Se había puesto muy mala la cosa para las cuerdas, era cierto, y ella aún no estaba mal del todo, había cuerdas que ni siquiera, habían salido de su caja...o eso se hacía creer.
Ella, como la mayoría de las cuerdas, soñaba con ser una cuerda de renombre, sí, esas que hacen un bien para la sociedad, como ayudar a subir el Everest o enseñan a que todo tiene que estar bien sujeto para poder avanzar...esas que no solo sujetan pantalones o que son usadas para hacer nudos. Eso era de coquetas...ella era de otra manera. Pero ahí se veía, en medio de un juego de fuerza, y ella sin saber que hacer y esperando no romperse, porque cuando una se rompe arreglarse es fácil pero nunca se queda como en un principio...igual que cuando se aprende...
Quería gritar, pero las cuerdas no hacen eso, no saben. Así que se dedicó a raspar manos o a aferrarse a ellas, porque ella, la cuerda, no quería caer...

miércoles, 31 de agosto de 2016

Reflexión a media tarde.

Hubiera sido una tarde de mesa camilla, chocolate caliente y calcetines de lana, pero hasta para eso no tuvo suerte. Era verano.  El calor venia de fuera y los pensamientos no fluían tan rápido como en la época invernal. 
Se preparó un té helado y añoró aquellos tiempos cuando su pluma plasmaba sus pensamientos. Cuando respiraba inspiración. Cuando tenía algo que contar. Dio otro sorbo, era buena haciendo tes. La parte justa de azúcar, no más hielos de los necesarios...podía llenar una cantimplora de ese brebaje y llevárselo en busca de su camino; y es que estaba en uno pero, al igual que los GPS antiguos, no encontraba ruta ni reconocía ese paraje. Solo decía cuando pueda de la vuelta, y no había llegado hasta ahí para eso. Estaba claro, había que actualizar.


lunes, 11 de julio de 2016

En medio de la campana de Gaus

Allí no estás sola. Hay mucha gente apretando, tanto que parece que dan algo gratis, pero no. Allí no hay nada gratis. Más bien lo contrario. Cada movimiento cuesta, y solo hay una regla " mejor en medio que atrás, porque ese es un sitio peor. Por eso, la gente se conforma. Refiere estar aplastada y conversar con el de al lado comentando que mala esta la vida.
Pero hay otros, otros sitios y otros  individuos que están más solos. Están en lado, allí la vida es más rosada, más idílica. Y si alguien del medio se quiere mudar allí, no tiene nada más que usar los codos. Hacerse un hueco y eso, cuesta. Por eso, la gente se conforma, sueña lo bien que se viviría allí y lo comenta con el de al lado.

lunes, 20 de junio de 2016

Romanticismo perdido

Que ya no hay dicen. Ni serenatas, ni paseos bajo la luz de la luna. Que se ha perdido, que quien tiene un poquito lo esconde, ni lo menciona. Que es motivo de burla, que apenas se echa de menos...eso dicen.
Pero no es verdad, quizá no es igual que antes, pero ya nada es igual que antes. ¿Por qué iba ser esto igual? Sin sentidos...
Señores, señoras, está en todos los lugares, sólo hay que saber buscar, fijarse, esperar. Ahora el romanticismo es tecnológico, pero todavía se encuentra algún corazón pintado en la pared, ahora se usa de lejos, pero todavía los bancos de los parques están llenos de besos, ahora no se espera, pero todavía hay marineros con una sola mujer en un solo puerto. Igual no ha muerto y solo sobrevive, quizá porque lo ha ha hecho siempre.

viernes, 17 de junio de 2016

decisión

Se acercaba un fin decidido. Uno donde no había un precipicio sino una gran llanura. Sin vegetación, sin gente ni espejismos... Tocaba caminar. No sabía dónde terminaba el desierto, ni si habría donde beber o pasar la noche, pero lo que sabía era que no había más opción. Con la cantimplora llena, el viento de cara y un plan se aventuró pensando que eso era mejor que nada.
Atrás, como dicen los grandes escritores, queda lo que no quieres que te acompañe, las decisiones acompañan y te susurran que era lo que tenías que hacer, y las ganas vienen y van volviéndote un poquito loco. Se acerca un fin, y un continuará. Me lo ha dicho una decisión

miércoles, 15 de junio de 2016

A veces, dos sería pedir demasiado

Erase una vez, y menos mal que fue una. Porque, igual dos, era pedir demasiado. Desde un principio el menú era a base de perdices. Los bailes de palacio estaban a orden del día y no hacía falta encantamientos. Y es que a veces, el principio es el final y al revés.
Y es verdad, que hay veces que existen cuentos sin contar, narradores callados y hadas madrinas en la sombra. Porque, a veces las historias pasan, y son de otra manera. A veces, no hay malos y tampoco buenos, a veces solo son casualidades y causalidades.
Ya que hay veces, y  momentos en los que  no cambiarías nada, ni un pelo, aunque ese día te haya salido un granito en la nariz...porque todo tiene su encanto, supongo...
Esas veces son las que cuentan, son mágicas y tienen el poder de que olvides todas las lagrimas, todas las guerras y quieres que duren por lo menos cinco minutitos más.
Sólo son una vez, porque dos sería pedir demasiado...

jueves, 9 de junio de 2016

Nadie llamó a la puerta

Ella estaba allí, sentada, mirando desde lejos, en la sombra. Soñando otra vez. Se pasó la vida sola. Esperando a que alguien viniera a ponerla patas arriba, a dar sentido a las horas y hace la cosquillas en la tripa. Pero no vino, o quizá sí. Pero mirarse al ombligo no te deja muchas perspectivas posibles... Sé dio cuenta que solo era una más y que ni era la princesa de cuento o había más princesas, una de dos. Sentarse a esperar no era una solución y que querer es poder teñía algunas lagunas fiscales. Pero la dio igual, y los años pasaron. Nadie llamó a la puerta.

viernes, 6 de mayo de 2016

Con los dedos manchados de tinta

Y salió así, con su sello personal. Con ese olor a libros, con esa mirada...porque necesitaba refugiarse ahí, donde todo tiene solución, buena o mala, pero la tiene. Todo está escrito y aunque lo parezca, no hay más salida que una.
 Sí, los libros, cuentos, historias; todos ellos, la habían enseñado mal. Sí, lo habían hecho y ella no hacia nada más que empeñarse que su vida tuviera un cierto parecido a ellos. En el amor, en la lucha...en el final feliz. Los buenos ganan. Porque no iba a permitir quedarse con la idea de esas "historietas" donde el bueno pierde...no, no, no. La fantasía no está para eso, la realidad sí.
Y eso esa lo que le preocupaba, que la realidad es otro cuento. Un rollo de cuento. Para que engañarse. A veces parecía que le cogía el truquillo, pero na', imaginaciones. Así que tomó una decisión, si pasaba algo y no le gustaba, lo reescribía, y así se pasó la vida, con los dedos manchados de tinta, esperando a dejar un día el folio en blanco.
Suerte amiga.

jueves, 5 de mayo de 2016

técnicas

La técnica cerrar los ojos y que el tiempo pase, está pasada de moda. Tanto, que no se conoce si ha alguien le ha funcionado...Quizá asomarse al abismo y sentir ese cosquilleo en el estómago a muchos les ayuda a saltar, a otros les paraliza y se pasan años sentados al borde debatiendo cuando es el mejor momento. Adelantar el reloj tampoco funciona. Créanme, es mentira. Solo se adelanta en tu salón.
Entonces, qué hago??!!! Se preguntarán, porque seguimos sin dar un paso, quietos mirando y sin mirar, saltando a medias, escuchando mil consejos y reproches y con la cabeza loca. No hay atajos, ni fórmulas mágicas, ni días de suerte, aunque sintamos en lo más profundo que todo saldrá bien. Porque no hay más camino que ese...
Pongan sus relojes en hora, respiren hondo y sigan adelante, tal vez si saltan haya abajo un mullido colchón, tal vez no, pero sólo lo sabremos cuando lleguemos abajo.

miércoles, 4 de mayo de 2016

Cuando te empeñas

Cuando te empeñas en encender una cerilla. Cuando empeñas y el viento sopla, ¿qué es más duro: encenderla o mantenerla? Quizá es más sencillo cerrar la ventana...lo que no puedes es sentarte en la oscuridad. Porque allí todo es más grande, ella se siente sola

jueves, 7 de abril de 2016

Contar...algo

Estaba claro que era así, que quería contar algo, que te quería contar algo. Su método no era útil, estaba claro, pero tardó en darse cuenta. Tardó porque la esperanza le alentaba para esperar, y las miles de excusas que fingían ser su amigas, la liaron para que un quizá se mudara a su boca.
Ilusa, pequeña, fugaz...palabras que revoloteaban sin querer y se posaban en su nariz, pero en su voz nada. Nada, no salía ni la tos.  Así que siguió queriéndote contar algo, pero se olvidó de la idea de que lo adivinaras.


miércoles, 6 de abril de 2016

Era ella

Estuvo ahí, igual que la Penélope de Serrat. Porque ella era para él, y no le podía fallar. Daba igual, siesta a en las sombras o a plena luz, daba igual. No se iba a marchar, la digieran vete o no te muevas... No importaba el cómo, ni él cuando. Si había que cruzar el mar, se remangaba el vestido y ale, ya se secará...

Y quién sabe, si eso es bueno o malo, si es justo o vale la pena. Quién lo marca, quién lo dice, ¿quién? Así que feliz por estar allí, demostró lo que hay que demostrar, sin fijarse en nada más que en que,  la elegida era ella.

tío vivo

Aunque lo pareciera, su mente no se había convertido en un tío vivo. Quizá estaba más cerca de sus objetivos, de su cómo...y como la sabiduría se la había dado los años, sabía que llegar a ese punto no era gratis...quizá le costara su vida...

Despertó de un eterno sueño, donde lo establecido era un sitio cómodo, pero como se ha dicho, era un sueño. Así que decidió caminar, lejos o cerca, eso no era lo importante, la cosa era cuanto más tenía que hacer...
Y es que era muy difícil saber cuál era el final pero no como se iba a llegar a él. Porque la inseguridad, es paciente y sabe cuando actuar. Habla bajito, y tiene como objetivo que te pares a mitad de camino.
Nada es fácil pequeña, y cuanto lo consigas, más acontecimientos para arrebatarte tu reinado, o tu casita del bosque. Todo pasa en un segundo. Todo se destruye en la mitad de tiempo...

Así que aunque lo pareciera no tenía una mente igual que un tío vivo, sólo intentaba ser coherente, deshacerse de la mochila y asimilar que todo tiene un precio...

domingo, 24 de enero de 2016

un minuto no es nada

Y cambia el tiempo, con prisa, sin mirar atrás. Intentando ser mejor pero a veces sin conseguirlo. Cambia sin consciencia, sin importar a quien influye, a quien derrota. No tiene miedo, ni siquiera esperanza...se agarra a su tic-tac, a su " mañana será otro día" y sigue su curso. Embauca a quien lo sufrimos, convenciéndonos que un minuto no es nada, pero sólo es la gota que colma el vaso. Y de repente han pasado años y él, se gira y nos mira de una forma picarona...juega con nosotros pero nos hace creer que es al revés. Maldito tiempo, no nos das tregua, y aunque se pare el reloj del salón, tú sigues corriendo y nos enseñas  que no vuelves, ni volverás y que el problema, es solo nuestro.