domingo, 9 de febrero de 2014

Amor

Hoy hablare de amor, sí, otra vez. Quizá porque es necesario o porque lo necesito. Porque es efímero, o porque a veces, desborda. Sale por cada poro, así , sin avisar. Obliga a echar de menos, a sentir vacío, a soñar...soñar y desesperar. A mojarse, a gritar para dentro y a escribir. Escribir bonito, escribir con deseo, con furia, con esperanza. Porque, el amor, sin querer, te hace eso: no saber o saber demasiado, todo dependiendo de la ocasión.
El amor, algo tan cursi, tan sentido, tan "corazonero", valientes los que lo gritan a los cuatro vientos y pobres de los que creen que no lo necesitan y lo ocultan; tocándolo solo a oscuras, por miedo al que dirán.
Bendito seas, y permanece siempre cerca de mí. Porque, yo, amigo mio, te quiero en todos tus estados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario